Conociendo el lugar (Privado. Anthea)

Su solicitud había sido aceptada dentro del instituto, era notable que después de vivir años en algunas tribus en áfrica, ahora estaría rodeado de otro tipo de tribus sociales, parecía que tendría muchas cosas con que divertirse, en éste momento santiago llevaba puesto un traje de vestir con zapatos relucientes, si algo tenía es que era demasiado obsesivo compulsivo con la limpieza y la disciplina.
Su traje era de color café y hacia juego con la corbata, caminaba de frente sosteniendo en ambas manos un equipaje que parecía ser ropa, sin embargo aún seguía siendo ligero y en la otra mano tenía en su poder un maletín de un hermoso violín el cual tocaba frecuentemente y componía algunas notas eso lo hacía reflexionar y pensar sobre las cosas que le rodeaban.

*Ingresando al pasillo del primer piso se da cuenta que hay una mujer*
- Buenos días - se detuvo, colocando ambos maletines en el piso.
-Me llamo Santiago- extiende su mano para saludarle y prestar atención a sus ligeros pero sencillos movimientos

Recibió su saludo sin inconveniente alguno sin embargo, se hizo notar con una pequeña agenda que es liviana lo suficiente para poder pensar que cabe en un bolsillo  tiende a notar que podría ser despistada e incluso falta de confianza en sí para memorizar las cosas, así mismo podría dar una deducción a ser una persona perfeccionista, anotar las cosas evita "errores y problemas" con ello no fracasaría,  se nota las iniciales de su nombre lo que también tendría que "pensar" que podría ser una mujer con autoridad por "marcar" sus pertenencias. su vestimenta pese que era casual imponía dejar ver sus muslos.
-. Será un placer compartir el espacio con usted .- respondió a la brevedad posible.
-. el lugar se ve bastante cómodo y con mucho espacio, ¿Verdad? .- a final de cuentas trataba de eludir la observación y pensamientos que corrían por su cabeza, así que simplemente sonrió con una sonrisa genuina.

-. Tengo 23 años y me trae la visita de continuar con los estudios de mi tutor  .-    Tomando sus pertenencias y tomando el paso para caminar hacia lo que sería su permanencia.

-. Por cierto suelo ser muy ruidoso.-  levantando la mano con el maletín que contenía el estuche del violín que el cargaba, el lugar tenía buena pinta, pero no dejaba de recordar el mejor espacio de campo y convivir con las tribu africanas su rostro se torno mirada abajo, mientras recordaba esos grandiosos momentos.

 -. Y bajo que rama de estudio  éstas dedicada? .-  Pregunto prestando atención hacia enfrente por donde caminaba