Tiro libre [Colectivo - Hyo-ri]

por **Leyna Neumann** Lun Oct 02, 2023 9:07 pm

La llegada de una nueva integrante siempre la emocionaba bastante, pero tampoco entendía el porque estaba particularmente emocionada por la llegada de la nueva alumna Coreana. Quizas había algo en su personalidad que la había empujado a, ahora mismo, estar casi arrastrándola hacia las canchas de la universidad.

Leyna era alguien tenaz, y pese a que había terminado con Johan Baüer, el capitán del equipo de fútbol y presidente de SG99, quería verlo a toda costa, y la excusa de presentar a Hyo-Ri al equipo había caído como anillo al dedo. Cuando llegaron al lugar supo que había calculado todo bien, 4:00 pm, era la hora en que los chicos salían a hacer el calentamiento. Podía ver el cuerpo formado de cada jugador caminando hacía la cancha de césped para comenzar a trotar. Abrazó emocionada el brazo de Hyo-Ri señalandolos –¡Mira! ¡Ahí van! ¿No son atractivos? Adriano Romano, Malcom Kreuz, por ahí es Howland y allí...– Entrelazó ambas manos –Está Johan Baüer –

Se giró para sentarse en las gradas y observar el calentamiento. A pesar de haber terminado con el, parecía que Leyna era de esas chicas que se mantenían amarradas obsesivamente a su pareja. –Hay alguno que llame tu atención Hyo-Ri? –

por **Jung Hyo-Ri** Mar Oct 03, 2023 3:19 am

Jamás esperó que lo primero que ocurriría al llegar a Caramel Rose sería ser atrapada por la presidenta en un discurso casi eterno sobre los chicos del campus. Ella no tenía la intención de conocer a un chico, en realidad venía a estudiar, pero por alguna razón había dado un giro dirigido a lo último que pensaba que sucedería, y de un momento a otro, pasó de estar escuchando sobre chicos a estar siendo arrastrada hacía ellos.

Caminó completamente insegura hacía las canchas deportivas, llegando justo en el momento donde los futbolistas iniciaban su entrenamiento. Desvió de inmediato el rostro hacia un costado, no entendía lo común de alemania de tener hombres semidesnudos, pero ella no estaba acostumbrada a eso, sin embargo ante el "mira", no pudo más que mirar, observando avergonzada a cada uno de los señalados, hasta que el desfile se detuvo en Johan Baüer y notó en la presidenta un brillo diferente. Le parecía ciertamente encantador.

Sonrió levemente al verla retirarse hacía las gradas, y caminó para sentarse a su lado. –Usted...– Su voz fue interrumpida por la pelirroja, negando nuevamente con sus manos. –N-no no hay nadie que me interese – Se sentó a su lado ladeando la cabeza. –Me gusta más el corazón de las personas que su aspecto físico –

por **Leyna Neumann** Dom Mar 17, 2024 5:36 pm

Quedó sin duda sorprendida por la respuesta encantadora de Hyo-Ri,su mirada se quedo pegada en ella unos segundos y luego sonrió con agrado. Su madre seguramente habría querido oír algo así de sus propios labios, pero ahora frente a ella tenia el ejemplo de señorita que se esperaba tener en Caramel Rose. –Eres como una princesita –

Apoyó sus manos en sus mejillas, mientras inclinaba todo su cuerpo para mantenerse atenta a la cancha, aunque su cabeza ahora estaba en un lugar mucho mas denso. –Mi mamá – Hizo una pausa un poco incomoda, no era un tema muy agradable –Mi mamá es la fundadora de Caramel Rose, así que tiene una idea bastante clara de como quería que fuera nuestra sororidad. – Volvió a mirar a Hyo-Ri y enderezó su cuerpo estirando sus brazos hacía el cielo mientras cerraba los ojos. –El principal problema es que no encajo mucho con las reglas estrictas que mi madre decidió que era el "ideal" de señorita, pero tu, por otro lado – tomó las manos de la coreana esbozando una enorme sonrisa.

–Hyo-Ri, tu eres realmente una princesita, o una muñeca –El brillo que antes tenían sus ojos volvió, porque bien que le gustaba emocionarse por cosas así. –¡SEGURO TENDRÁS MUCHOS ROMANCES UNIVERSITARIOS! ¡ANIMO! –

por **Jung Hyo-Ri** Lun Mar 25, 2024 1:56 pm

No imaginó que sus palabras movieran algo internamente en Leyna, la presidenta parecía tan segura de sí misma y de las cosas que le gustaban que aquella respuesta que se trasladaba a sus orígenes y línea materna le sorprendía bastante. Aun así, ella misma sabía lo que era tener una madre así, aunque a último momento su propia madre hizo un acto de liberación y la mando a Alemania, recordaba que toda su vida debió cumplir con estándares coreanos. Por eso ella era así. “Una princesita”.

Sonrió levemente y ladeó la cabeza escuchando a la hermosa Alemana hablar, aunque Leyna Neumann estuviera celosa de sus habilidades, ella misma sentía envidia de no poder ser tan abierta y expresiva como Leyna. Soñar en voz alta tan fuerte, iluminar la vida de la gente con esa energía tan divertida. Realmente quería ser esa persona, pero era alguien un poco más sombría.

De pronto nuevamente el tema de conseguir novio vino a colación, aunque ella se había negado en múltiples formas solo encontró espacio para reírse. –Y-yo realmente no creo…pero gracias por tenerme fé –

por **Ryan Dawn** Lun Mar 25, 2024 2:21 pm

Habían pasado apenas unos minutos desde que se había separado de sus amigos, después de terminadas las clases iba directo a su departamento a dormir un poco y luego salir por allí, pero algo lo detuvo mientras pasaba por las canchas.

Normalmente veía una que otra muchacha del campus sentadas mirando el entrenamiento de los futbolistas. Vacíos musculados sin mucho cerebro (Tampoco era que el tuviera tanto pero sin duda era mucho más atractivo que ellos) casi todos los días eran observados por la presidenta de Caramel Rose, Leyna Neumann. Una hermosa pelirroja que tenía un enorme letrero que decía “cuidado con el perro” por quien era su novio ¿O no lo era? Ya ni estaba seguro. El punto es que al lado de ella hoy había alguien que no había visto antes en el campus ¿Era nueva? ¿Estaba allí para perder su mirada con asquerosos deportistas?

Se acercó disimuladamente hacía las gradas, y pudo escuchar una porción de la conversación, cruzó sus brazos prestando atención a las palabras, “No hay nadie que me interese” eso era una victoria para él “Me fijo más en el corazón que el aspecto físico” Es que aún no lo habían conocido. Sin querer acabó escuchando una historia principal de la Alemana, pero que finalizó con la entrada que el necesitaba.

–¡Me ofrezco! – Alzó la voz mientras subía las gradas con las manos en los bolsillos, para sentarse al lado de la chica asiática. –Puedo ser con gusto el primer romance universitario para ti –Ladeó la cabeza extendiendo la mano para tocarle un mechón de cabello.

por **Leyna Neumann** Jue Abr 11, 2024 3:44 pm

Aunque Hyo-ri parecía ser del tipo callada, notó en ella la atención que no había notado en otras personas, como por ejemplo Violet, quien era su mejor amiga. Quizás por que Violet era como su mamá.

Cuando Johan Baüer salió a escena, desvió el rostro y cruzó sus brazos, y solo volteó la cabeza para saludar efusivamente a otro jugador. –ANIMO HOWLAND ¡ESTARÉ APOYANDOTE! –Fue ahí que precisamente escuchó la voz cercana de un chico, girándose automáticamente hacía él.

Abrió los labios sorprendida de lo atractivo que era, y este iba directamente hacía Hyo-Ri. Cubrió su boca con ambas manos emocionada y miró a la nueva Caramel Rose entre cómplice y gritos de fan girl. Esperaba una respuesta afirmativa de la asiática, pero no estaba muy segura si ella se la daría, parecía bastante reservada y no dispuesta a ceder.

–AH! Ahí está Howland, el chico que me gusta, ya regreso – Se puso de pie inmediatamente, a decir verdad, ni siquiera recordaba el nombre de ese jugador, solo sabía que tenía un nombre parecido a Howl. Bajó corriendo las gradas para acercarse a la puerta de la cancha y llamar con la mano al jugador para siquiera hacer la finta. En el fondo solo quería apoyar a Hyo-Ri, y de paso sacarle un poco de celos a Johan Baüer.

por **Dimitri Howland** Jue Abr 11, 2024 4:16 pm

Otro día básico de entrenamiento sin mayor emoción. En los camerines el entrenador, en un estado de sobriedad y agotamiento dictaba las instrucciones a tomar en el día. Nada nuevo, equipos aleatorios y nuevamente los ganadores celebraban por tener a Johan en su equipo, ya esto era un vaticinio de que seguramente su equipo iba a perder. –Buena suerte –Miró a sus compañeros y se dispusieron todos a salir caminando hacía la cancha e iniciar el calentamiento.

“Mira Johan, es Leyna Neumann” comentaban algunos, todos sabían de la tormentosa, pero cliché relación entre el capitán de SG99 y la presidenta de las Caramel Rose. Era casi una relación de película típica de Hollywood, y mientras estiraban y trotaban por la cancha, Dimitri pensaba que quizás este era el momento de la reconciliación, por algo la pelirroja estaba sentada ahora allí animando a viva voz a ¿H-Howland?.

Se quedó quieto cuando escuchó su apellido y todas las miradas se voltearon hacía él. Giró su cabeza hacia las gradas y observó a Leyna aun más confundido, alzando la mano tímidamente para saludar, pero sintiendo unos ferocez ojos en su espalda. ¿Q-qué estaba pasando? ¿Por qué de repente era el centro de atención en la cancha? “¿Leyna y Howland?” “¿Qué pasó con el capitán?” “¿Howland le quitó la novia a Baüer?” Los cuchicheos comenzaron a hacer frente, solo distraídos por el sonido del silbato del entrenador. Era momento de prepararse.

De repente, notó a la pelirroja llamándole. Quedó otra vez confundido, incluso se señaló a si mismo antes de caminar hacía ella demasiado desconcertado como para advertir que seguramente Johan iba a destrozarlo en la cancha. –Neumann ¿Ocurrió algo? – Dijo lo más relajado posible, aunque en el fondo estaba nervioso. –¿Quiere pedirme un favor para Johan Baüer? –

por **Jung Hyo-Ri** Lun Abr 15, 2024 4:08 pm

Curvó las cejas confundida al oírla gritar por otra persona ¿No venían a ver a alguien de apellido Bauer? Aunque prefirió no decir nada, ya que había la posibilidad de que ella fuera la que se estaba confundiendo. Entonces escuchó la voz de alguien cerca, y se giró para percatarse de la presencia de un joven rubio de buena apariencia que de forma intempestiva se sentaba a su lado diciendo las palabras más desvergonzadas posibles. Claro que esto la sacó de su centro, poniéndose completamente roja de inmediato, mientras abría los labios buscando decir algo en alemán, pero balbuceando silabas en coreano.

–Uhmm…Este –Su cabeza diseñaba una excelente oración que no podía salir de su boca, y para colmo, Leyna quien debía acompañarla, de repente decidía que era momento de ir a ver a su novio. Se giró una última vez para mirar a la pelirroja. –L-leyna Unnie, espera – pero ella salió más rápido de lo que pudo terminar su oración.

Bajó de golpe su mirada hacía sus manos, las cuales se mantenían apoyadas en sus piernas. Jugaba nerviosamente con sus dedos en lo que sentía el perfume ajeno tan cerca, y la yema de los dedos agarrar un mechón de su largo cabello. –Y-yo…N-no no estoy buscando algo así por ahora, m-muchas gracias – desvió el rostro hacía otro lado presionando sus labios, incluso ahora podía sentir la vergüenza expresándose en el fuerte color rojo de sus mejillas.

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