¿Qué más podría pasar?

Aquel día tarde un montón en llegar y es que no sabía como explicarle a mi madre que no iba a hacer nada malo aquella noche , y claro , para una madre , que una hija adolescente salga de noche es algo que la asustaba mucho, mas cuando era uno de los principales apoyos que tenía, cuando llegue a la escuela a duras penas me pude saltar la cerca y luego corrí directamente hacia los jardines , de verdad esperaba que Natalya hubiera llegado porque aquella escuela de noche era realmente aterradora.

Cuando finalmente llegue observe a Natalya con aquella ave que se posaba con elegancia cerca y le salude alzando mi mano - H-hola!! ...lamento la tardanza ...- Suspire y luego estire mis brazos hacia arriba cerrando los ojos con desanimo - Mi madre me hizo un espectáculo pensando que me iria a juntar con algun sujeto ...- sacudi mi mano un poco con despreocupacion - Al final le he dicho que iba a ir a dormir donde Emilie , como no tiene su numero no la molestara ...-

Observe hacia la entrada de la zona prohibida , y sentí un escalofrios , y de inmediato recorde algunas cosas - ¿Dijiste que Okita y tu vinieron acá aquella vez ...? - Baje la cabeza y me rasque la mejilla , volviendo a ver a natalya - La otra vez , Okita salio corriendo de su casa con cierta preocupacion cuando estaba con el ... ¿Habrá venido aca? ...- Ahora tenía mas curiosidad ,¿ Que clase de misterios tenia este sitio? y ¿Porque a Natalya y a Okita le interesaba tanto este sitio? ,¿ podría significar algo para ellos?.

Suspiré profundamente y luego empuñe mis manos asintiendo con la cabeza y alzando un poco mi voz - MUY BIEN! ahí vamos...-

Esbocé una leve sonrisa cuando vi a mi amiga finalmente llegar, escuché atentamente sus palabras,y a medida que la oía una mueca de preocupación algo cómica se hizo notar en mí, para luego después de haberla terminado de escuchar reír levemente.

-¿En serio pensaba eso? - imaginarme la escena madre-hija por algo así me sonaba un tanto cómico y es que recordaba cuando mi padre a veces se ponía tan sobre protector solo por ir de compras de vez en cuando

-Menos mal que la convenció...aunque igual me siento algo mal por haberle metido en dificultades...-dije esto último rascandome la cabeza en símbolo de mi pesar, hasta la Emilie-san estaba envuelta en todo, solamente esperaba que todo saliera bien.

La conversación siguió su curso, a la francesa la notaba un tanto tensa y no era para menos, inclusive yo que no era la primera vez que venía me encontraba un tanto nerviosa. Examinaba el alrededor con detenimiento esperando que nadie vaya a estropear nuestras investigaciones, mientras tanto escuché lo que decía la muchacha, mientras asentía con mi cabeza a lo que dijo primero, y Klein comenzó a aletear un poco al escuchar el nombre del japonés, le hice una seña para que se posará en un árbol en modo de vigilancia mientras le respondí a la muchacha algo ida, como recodando aquel día.

-Sí...aquí llegamos de casualidad - observaba atenta el vuelo del ave, y seguía escuchando a mi compañera de curso, quedando estática y abriendo mis ojos en modo de sorpresa mientras mi mirada se posaba en mi ave, tratando de analizar lo que recién me había dicho la francesa ¿ella y el japones habían estado juntos en la casa de él ? negué con la cabeza de inmediato no era un tema de mi incumbencia, voltee mi mirada hacía la chica de nuevo, quién sabe...quizás él había venido a ver su tío, quizás no, no tenía la menor idea.

-Quizás sí...quizás no, lo único que creo saber es que deseaba volver acá - mencioné pensativa, desde lo pasado con su tío ya habían días, así que las palabras exactas de esa noche no las recordaba tan bien, de igual forma importaba lo que ahora se nos venía por delante, escuché a la enérgica francesa, haciendo que mis energía igual volvieran y no andar pensando cosas sin importancia.

-No lo diga tan fuerte...que aún tengo mis dudas que realmente nadie se quede cuidando por aquí - dije media entre risas, lo bueno de estar con Katherine-san que los momentos cómicos nunca se acabarían.

-Muy bien vamos a por...-la quede pensando, ciertamente no tenía algo fijo a encontrarme allí en ese edificio - nuevas aventuras y descubrimientos? - dudosa lo dije pero con entusiasmo, en realidad quería descubrir lo que había allí. Silbe y Klein se puso en mi hombro.

-Le mostraré el camino, no es tan lejos - sonreí levemente y me dispuse a caminar esperando que ella me siguiera, prontamente llegamos a una gran puerta principal, algo destruida y arruinada, la abrí con suavidad y un chirrido algo tétrico se escucho haciendo que la piel se me erizase de nervios, camine con algo de temor para entrar, voltee mi mirada hacía atrás donde se encontraba mi compañera.

-Bien Katherine-san, espero que esté segura de acompañarme, no sé que habrá acá dentro - le dije un tanto seria, no quería obligarla a nada, más tomando en cuenta que ya la pura entrada daba algo de miedo.

La verdad es que desde que mi padre había muerto , mi madre solo dependia de mi y mis hermanos era por eso que le asustaba un poco que me pasara algo , reí por sus palabras , a pesar de que habia tenido que inventar una excusa , sabía que no era posible que nos descubrieran (???) o al menos eso quería creer porque que todos se enteraran tambien me ponía nerviosa.

Escuché lo de Natalya , y miré a mis alrededores , no podía imaginar que clase de situaciones vivieron ella y Okita al verse en un sitio asi , e incluso el caminó era tenebroso y erizaba los bellos ,me era imposible imaginar lo que vivieron aquella noche -Entonces si es probable que haya venido solo ....Ese chico , algún día le pasara algo verdaderamente grave por arriesgarse de esas formas ...- Suspiré acomodando mis manos en mi cintura mientras nos adentrabamos al lugar .

Llegamos a una puerta degastada , y la observé fijamente , por alguna razón ya me había aterrado , pero cuando Nath me observó , golpee mis mejillas con ambas manos , frunciendo mi entrecejo y dandome animos para ingresar , caminando tras de ella algo dudosa pero , la curiosidad era mucho más grande que mi temor - Ya estamos aqui , no hay vuelta atrás - Cerré mis ojos y sonrei , mirando luego a todos los sitios de los alrededores y quedando algo sorprendida al ver un cuadro de una hermosa mujer rubia en la pared , esos tipicos cuadros de la edad antigua desgastado , la oscuridad era tremenda asi que era algo dificil observar bien de quien se trataba - ... Uh.... ¿Porque aun conservan estos sitios?...- Caminé en el interior mirando hacia mis alrededores y pisé un antiguo vaso de vidrio que estaba en el suelo , quedando helada por el ruido y casi palida , levantando el pie por reflejo y volteandome hacia nath sin bajar el pie .

- U-uh.... - Lo primero que se podía observar era una recepción ,¿Podía ser que el edificio antiguo fuera una especie de albergue ?...Me tranquilizé en el momento , y puse mi pie sobre el piso cuidando con no pisar nuevamente aquel vaso , y saque mi celular de mi bolsillo, encendiendolo y así ,de esta forma alumbrar los alrededores levemente

-Este sitio es un cochinerio! - Apenas dije esto se escuchó claramente los pasos de alguien más corriendo subiendo por unas escaleras que estaban ubicadas a la derecha.

Me alegré bastante al escuchar la respuesta afirmativa de la francesa, tenía razón, si ya habíamos recorrido un camino y estabamos a estas horas aquí no debía haber vuelta atrás, solo que quería asegurarme que ella quería ir a aquel sitio. Camino con lentitud pero segura, escuchaba detrás los pasos de Katherine-san, al pasar aquella desgastada puerta, lo primero que se podía observar era aquel cuadro con una mujer rubia, aunque quería observar si había algún grabado u algo que indicará de quién se trataba era imposible, la oscuridad hacía dificultosa nuestra estancia.

-No lo sé, el Director es algo raro...no entiendo porque conservan este tipo de cosas, no tiene utilidad...creo - dije esto último algo dudosa y recordando lo que tiempo atrás había visto cuando había ido con el japonés y habíamos encontrado el cuerpo de su pariente. Mientras aún observada de pronto escuché un ruido que me sobresaltó de inmediato, miré atrás y la francesa ya no estaba.

-¿K-Katherine-san? - voltee hacía donde provenía aquel estruendo y allí estaba ella, solamente se trataba que había roto un vaso.

-¿Está bien? - fue lo primero que me vino a mi mente para preguntar, mi cara al ver a la muchacha ahí ya había recuperado color, por lo menos se notaba bien, aún estaba parada frente al cuadro, con la luz del celular ahora se veía mejor todo.

-Esta todo en ruinas...quizás cuando construyeron este edificio - dije mirando alrededor, aunque luego se escuchó unos pasos, alguien o algo corriendo, de inmediato saque los cuchillos que andaba siempre trayendo conmigo, fue un acto reflejo, aunque trataba de no ser tan miedosa, al fin y al cabo igual era bastante cobarde.

-A-alguien viene, tenemos que tener cuidado esperar que no sea un cuidador o algo, ocultemos ahí - y apunte hacía unos relojes gigantes, habían varios, un tanto viejos al igual que todo lo que había ahí, los ruidos se escuchaban más cerca.

-Rá-rápido - le dije despacio a la francesa, mientras aún tenía los dos cuchillos pequeños uno en cada mano, ahora que lo pensaba la chica nunca me había visto con ellos.

-Por cierto, estos siempre los ando trayendo, es de familia - dije un tanto cómica esperaba no haber causado más confusión a mi amiga.

Una gota resbalo de mi cabeza, me encontraba algo desconcertada, pues contrario a lo que podía pensar la francesa estaba emocionada por como iban ocurriendo las cosas, por mi parte no podía evitar sentir algo temerosa ¿un poco cobarde? probablemente, pero también tenía demasiada curiosidad como para retroceder.

Los ruidos no cesaban y la luz era demasiado escasa, estabamos quietas esperando, haber si en efecto alguien llegaba pero nada sucedía, si nos encontrabamos con alguien ¿que deberíamos hacer? ¿que tal si era un cuidador? Por algo esta zona era "prohibida" ¿Qué tan importante había sido este edificio? Muchas preguntas rondaban en mi mente, entre el pánico de ser descubiertas por alguna autoridad, no era de creer en cosas paranormales así que por ahí no iba mi preocupación aunque a estas alturas podiamos encontrarnos lo que sea.


Una luz me hizo sacarme de mis cuestionamientos, quede mirando hacía donde proyectaba el celular de Katherine-san, escuchando la pregunta de la chica, con mucho cuidado me agache para tomarlo entre mis manos - Parece un diario, pero esta muy viejo como todo en este lugar, las letras están borrosas - susurré por lo bajo, tratando de averiguar que decía, esta situación se me hacía familia - quizás cuando tengamos más luz podremos ver mejor y así...- no alcance a terminar pues los ruidos se hicieron más fuertes y más cercanos, ¿alguien aproximandosé?, no había duda aquellos sonidos se trataban de pasos que avanzaban rápidamente. -V-v-vi-viene alguien...-dije algo aterrada tratando de no gritar y tranquilizar, por mi mente paso  a mi tía viniendo pues andaba en lugares que no debía a horas tampoco recomendables, un leve escalofrio corrió por mi cuepo, cuando ella se enojaba era de temer. 

De pronto una voz algo extraña y escalofriante (?) hizo presencia, sus palabras no las había podido entender con claridad, di un pequeño un pequeño brinco de la impresión y al asomarse un poc y ver una sombra desconocida de forma casi automatica grité y lancé uno de los cuchillos a la altura del hombro de la sombra pero suficientemente lejos en sí de aquella supuesta persona, había sido una reacción natural de los nervios.

-¡Ah! - me tape la boca de inmediato con la mano que ahora tenía desocupada, mientras buscaba con la mirada a la francesa y con la otra mano que tenía el cuchillo apuntaba a la sombra, si había tenido intención de permanecer ocultas, no había dado resultado.-

Luego de aquella reacción natural de supervivencia (?), pose mi mirada sobre Katherine-san y asentí levemente a su pregunta.

-Quizás, aunque aquí no se ve prácticamente nada así que, no nos han reconocido.

Apenas terminé aquella frase, se escucho un último grito, giré de inmediato hacía donde provenía aquella voz pero solo veía una débil sombra, "morir tan joven" fue lo único que llegó a mis oídos.

-¿Escuchó eso verdad? -Dije preocupada,  ideas tras ideas comenzaron a venir a mi mente, cada una más loca que la otra, y ¿si había aquí un asesino?  quizás por eso nos mandaba un mensaje diciendo que íbamos a morir joven, o ¿si había alguien en problemas? pues a los instantes después de aquellas palabras se sintieron veloces pasos que hacían que aquella sombra solo se alejará de nosotras.

- A-alguien parece que esta en problemas o...n-nos qui-qui-quieren...-no alcanzaba a terminar mi frase ya que solo imaginarme la idea de un asesino me hacía quedar paralizada, quizás por eso había salido corriendo, como había lanzado mi cuchillo se fue a ocultar y tomarnos por sorpresa y así torturarnos cruelmente en este lugar hasta aburrirse y finalmente saciar su sed de sangre con nosotras (??). 

-¡Nooo eso es horrible! ¡no podemos morir! -grite de la nada, aterrada de mis propios pensamientos, en esos momentos mi amiga seguramente pensaba que estaba loca (???), tome un poco de aire, calmándome y colocandome algo más seria (?) ya que si volvía a gritar quizás terminará por asustar a la francesa.

Esta idea aumento al escuchar débiles pasos, casi imperceptibles, haciendo un mayor esfuerzo miraba alrededor tratando de concentrarme haber si encontraba a nuestro futuro asesino (?) y una sombra nuevamente hizo aparición, de inmediato saque otro dos de los cuchillos y sin duda demasiado los lance en dirección de la sombra haciendo que si mi intuición no engañaba, uno pasaría cerca de los cabellos y otro del cuello.

-¿¡Qui-quién anda allí?! - dije más autoritaria que con miedo, si alguien venia hacernos daño, seguramente ya se habría dando cuenta que le daríamos la pelea (?) total cuchillos no me faltarían, hacía cuenta que tenía un arsenal (?) de ellos, era una italiana que por extrañas razones había sido entrenada para defenderme, lo único que me arrepentía era que al momento de entrar a este sitio, había decidido dejar a Klein cuidando afuera.

-Katherine-san alumbre hacía allá con cuidado, es hora de terminar con esto.- aquella era como una sentencia de guerra, ya estas alturas estaba preparada para lo que fuera, además aún teníamos cosas que investigar aquí.

No estaba para nada seguro de que era buena idea volver a ir donde estaba el asesino [??],pero Okita parecía muy seguro de lo que hacía por lo tanto llevarle la contraria tampoco parecía muy buena idea ,pero aun así ,se moría de miedo.


-   O-okita ..¿Q-que tal si nos ven? -


Murmuró y retrocedio un poco cuando el japones se detuvo. Siguió con la mirada la mano ajena y pudo percatarse del cristal roto , y luego observó el reloj quedando totalmente helado cuando una mano salió de las sombras y lanzó unas especies de cuchillos y luego la voz que hacie eco en las paredes.


Se paralizó quedandose quieto y luego rápidamente empujó al temerario japones tras el mueble de la recepción escondiendose en este.


-O-Okita sea quien sea quien este allí no nos quiere acá..-


Dijo en voz baja , y luego intento tomar uno de los libros que estaban ubicados desparramados por el piso de donde estaba el mueble ,poniendose de pie para lanzarlo hacia los relojes.


-¡No te atrevas a desafiarnos! -


El golpe puso en funcionamiento uno de los relojes que rapidamente comenzo a tocar una melodia que en el contexto en el que estaba se oía bastante siniestra.  Se quedo totalmente estatico mirando el tenebroso reloj,  era el mismo sonido que tenía la caja músical que le había regalado su padre a su madre.

Sonido del reloj:   Sonidito

Spoiler:

"Creo que es un zombie" fue lo que me dijo la francesa, convencida, la miré confusa, yo no creía en esas cosas en absoluto, más como estaban las cosas actualmente mi estado mental me hacía pensar en cualquier cosa, no en un zombie, insistía en que no existía tales cosas, pero si pensaba en que alguien  muy malo podría andar ahí.

-¿U-un zom-zombie?...no sé, no creo mucho en eso...-  dije dubitativa en voz baja, mirando a la chica, más alguien tomaba la palabra, como respuesta a mi orden. "No te atrevas a desafiarnos" y encima lanza un objeto que no alcancé a ver bien - al menos que los zombies hablen tan claro (???)- no quería caer en pánico del nerviosismo, pero aquello era prácticamente imposible,  más cuando aquella músiquita comenzaba a sonar, haciendo de todo esto un lugar más tétrico y espeluznante de lo que ya era. Además alcanzaba a escuchar unos murmullos que por la música no captaba bien, seguramente sería el asesino (?) planeando como hacernos sufrir aún más y así cumplir sus fantasías (?)y aumentar su muerte en homicidios, tipo lo que salía en esos programas donde muestran a criminales y estos hacen una especie de ritual antes de acabar con sus víctimas.

-¡Tú no te atrevas!, esto es solo una muestra de lo que te puede pasar - grité en respuesta amenazando, mi tono de voz era decidido, sacaba fuerzas de mi más recóndito ser, iba a sacar otro cuchillo para lanzarlo y demostrar  que no nos daba miedo (?) pero justo cuando bajo la mirada para sacar el objeto de mi ropa, veo una rata enorme pasar, causándome pánico y sin siquiera gritar, me desmayé haciendo que mi cara se golpeará de pleno con el piso, mi pobre mente no dio más, podía soportar un criminal, pero no ese tipo de animal.