¿Cómo es que llegué aquí? {Priv. Caroline}

por **Fleur Adrinette** Jue Jun 16, 2016 10:23 am

Estaba bastante perdida en un lugar lleno de gente, todo por aventurarse a explorar en semejantes horas de la noche. Habría sido más sencillo haberse ido directamente a casa saliendo de trabajar. Como todas las noches, ahora estaría descansando, sentada en su cómodo sillón, viendo alguna película con su amado gato Noir. Pero por estar de curiosa, por querer conocer los alrededores del centro comercial, no se fijó por donde rayos iba y gracias a su mal sentido de ubicación ahora estaba en una calle bulliciosa y con muchas luces que la distraían, no era una gran ayuda para ubicarse.

Dicha calle era como esos lugares a los que iban jóvenes de su edad a divertirse o los adultos. Al menos eso había visto en películas, la vida nocturna en la gran ciudad. Aunque ella jamás había ido a esa clase de lugares, no porque fueran malos, simplemente ella no tenía muchos amigos con quienes salir, además de que no consume alcohol. Resopló exasperada, miraba de un lado a otro en busca de alguien que pudiera darle direcciones, pero en su mayoría eran jóvenes que lucían alcoholizados y la otra mitad eran adultos que lucían algo intimidantes, así es que mejor no, mejor seguir caminando.

Finalmente llegó a un establecimiento que lucía bastante decente, podría decirse que hasta elegante y costoso. En la entrada había dos hombres de traje, que antes de poder continuar al interior del recinto, la detuvieron, pidiendole identificación que mostró sin problema, sacó de la cartera la identificación mientras sonreía para sus adentros, las ventajas de ser legal, aunque no iba a consumir, solo quería pedir direcciones sobre como volver al bendito centro comercial. Aquel lugar tenía una iluminación tenue, lámparas que lucían como burbujas colgaban del techo dando un ambiente ligeramente romántico, había música fuerte pero agradable, diferente a la del resto de los bares, que usualmente era estruendosa y molesta.

La mayoría de las personas que iba encontrando en el lugar iban bien vestidas, de traje y vestidos cocktail. Vaya aquel lugar si que lucía refinado. Pero lo que importaba era llegar con los bartender, seguro ellos tendrían la información que necesitaba. Se sentó en un banco alto frente a la barra. -Disculpe...- Dijo en voz tan baja que el bartender ni pareció notar que ella estaba ahí. -¿DISCULPE?- Levantó más la voz captando la atención del joven, que le dedicó una pequeña sonrisa y con una seña le indicó que esperara un momento, ya que estaba atendiendo a cuatro personas que estaban antes que ella. Suspiró profundamente y se recostó sobre la barra dispuesta a esperar al amable joven, volteó a su derecha encontrándose con una linda mujer bebiendo vino, se le quedó viendo pensando si estaría lo suficientemente sobria para preguntarle como volver.