Inspección de pasillos [Priv. Hye]

El viento de los patios era totalmente fresco, pero de vez en cuando era necesario estar en el interior de lo que era el establecimiento educacional y no por un asunto de superficialismo, si no más bien por cuidar su salud y su aspecto personal, sabía que no sería respetado por los alumnos si vestia como un vagabundo o si sus cabellos estaba ligeramente desordenados.

El como ser humano, era alguien muy metodico, muy obsesivo con varias conductas, por ende,que su cabello estuviera un poco desaliñado o su uniforme algo desarreglado le producía bastante ansiedad, y no era muy bueno lideando con ese cambio de conducta, por lo general acababa con un desgaste emocional tremendo.

Mientras caminaba por los pasillos de vez en vez solía mirar su reflejo en la ventana, solo para cerciorarse de que su cabello no se había visto afectado por el viento, y cada vez que lo hacía comprobaba que no, estaba perfecto. - debo intentar controlar este cuadro psicotico...-   solía decirse a si mismo para ser capaz de controlar algo de su ansiedad, suponía que esto lo había adquirido el tiempo cuando fue famoso en francia, no podía haber sido más metodico y perfeccionista que en ese tiempo.

Los pasillos ahora se habían convertido en su lugar de trabajo, y a diferencia de su colega Christopher, el realmente amaba su trabajo, adoraba poder desempeñarse con efectividad en esta area, era un trabajo normal en su aburrida vida anormal.

Afortunadamente luego de la pequeña crisis de ansiedad, aquel hombre podía sentir que tenía el control de su perfeccionismo, y continuó su habitual ronda como de costumbre simplemente atento de la infracción nunca de los inocentes.  Una chica pasó raudal por su lado –Prohibido correr por los pasillos- susurró mientras ella pasaba por su lado, pero pudo escuchar el sonido de la suela rechinando con el piso encerado del instituto, ella se había detenido de golpe.

Aludió esto a que, posiblemente fue la forma de la menor para obedecer su pequeña orden, pero luego sintió los pasos acercarse y antes de que pudiera darse cuenta ya estaba aquella chica jadeando justo frente a sus ojos.  “Tu...Tu…” – ¿Yo, yo? -  Ladeó la cabeza esperando que aquella chica pudiera expresar su incomodidad, pero grande fue su sorpresa cuando se dio cuenta que la incomodidad era más bien la emoción de una admiradora al haber descubierto su secreto.

No supo que decir, no podía mentir, en su uniforme decía “Sadé”, pero no era como si estuviera conforme con lo que había vivido antes en Francia, estaba completamente seguro que casi nadie lo reconocería en otro país, y aunque la chica se notaba emocionada con su breve carrera actoral, el mismo solo tenía ganas de correr de allí. “Prohibido correr por los pasillos” pensó.

- Hahahaha….-  Solo encontró que lo mejor era reir, ya había sido atrapado, tenía que enfrentar la situación –Me encantaría pero creo que soy demasiado mayor para ti- ¿Cuántas veces había dicho lo mismo?, pensaba que ya no tenía que dar esa excusa. – Por favor, puedes mantener el secreto…- llevó su dedo hacia sus propios labios y chitó, cerrando después uno de sus ojos coquetamente.

Algo había salido completamente mal,  y aunque sabía cómo controlar sus emociones a la perfección, era completamente incapaz de reprimir la sorpresa que estaba expresada en cada célula de su rostro. Ahora lo comprendía, aquella chica era una de aquellas fans que no había forma de rechazarle, eso realmente lo dejo algo desconcertado. 
 
Mientras intentaba darle un sentido a todo este lio podía sentir los suaves pechos ajenos rozar sus manos, posiblemente correría peligro si alguien observaba aquella escena que aunque había resultado de la inocencia (?) de la menor, podía ser increíblemente mal interpretable.  –Y-yo …- intentó decir algo pero no sabía ocupar las palabras adecuadas – No me puedo casar porque, tengo novia- (?) No, no tenía pero consideraba que era una buena forma de zafarse de esta, además que en cualquier caso, no quería acabar muerto como John lennon (?)
 
Cerró los ojos sonriendo divertido de su propia fortuna, bajó un poco la cabeza negando con ella misma, por lo general esto era trabajo de su ex manager, debió aprender una que otra técnica antes de decidir renunciar. – Pero puedo ayudarte si eso deseas para conseguir un buen esposo, pero con la condición de que no corras por los pasillos y ….- continuó riendo bajito tomando a aquella chica por los hombros y aprovechando para empujarla ligeramente contra la pared , de esta manera podría susurrarle con suavidad – Que nadie se entere de quien soy en realidad…-

Esas amargas palabras saliendo de tan esplendidos labios, SIN embargo mi determinación probablemente era la mas grande de todas, de todas en este planeta!

-Lois-san! no debe preocuparse por ello! "Este momento al fin nos ha unido, sin embargo  en un momento problematico, pero ahora que nuestros caminos se han porfin entrelazado, y aunque no vayamos juntos tomados de la mano, se que el destino es el mismo, asi que te esperare a donde vayas! caminando a tu ritmo"

OH SI! me lo sabía de memoria, cada uno de esos diálogos que había escuchado tantas veces salir de esa dulce boca en ese todo tan memorable, desde que era tan pequeña!

ACASO ESPERABA QUE ME RINDIERA ASI NADA MAS!

Aunque debía admitir que esto me causaba algo de miedo, Y A QUIEN NO!

Sin embargo eso hacía que mi corazón se acelerara, NO había mejor esposo que Lois-san!

Le escuche reír, aunque no sabia porque, pero me encantaba. Y después simplemente ponerme contra la pared y susurrarme de esa manera, era imposible no reaccionar.

Aprovechando el momento y la cercanía sellaría el acuerdo con un ligero beso en sus labios

-No se lo diré a nadie!- 

Dije animada y luego lo mire a los ojos. No se estaba alejando. D...DE...DEBÍA HACER MAS?. 

-NADA MAS HASTA LA NOCHE DE BODAS!- 

Dije cerrando mis ojos con fuerza muy muy MUUUUY APENADA.

Al intentar controlar un poco esta situación, aparentemente todo se le salió de control, un beso tierno, delicado, inocente envolvió sus labios, acto que simplemente lo dejo completamente mudo, sus ojos azules se abrieron de tal forma que era fácil darse cuenta que estaba algo sorprendido.
 
Una de sus manos se mantuvo fija en la pared, mientras que con la otra tocaba sus labios ligeramente con la yema de sus dedos. Curvaba un poco sus cejas mientras que su columna espinal se erguía denotando la clara altura que tenía en relación con la menor.   Entrecerró los ojos levemente, bajó la mirada hacia el suelo, mientras lentamente el contacto que tenía sus dedos con su boca iba desapareciendo con lentitud.
 
Caminó alejándose de la escandalosa chica, y luego simplemente vio su reflejo en la ventana –Frente a mi…-Tocó el vidrio deslizando la yema de sus dedos sobre la mejilla de su propio reflejo – Lo que ahora veo frente a mis ojos….es el reflejo de una persona infiel…- Cerró por completo sus ojos, cubriendo parte de su rostro con la mano libre.
 
Miró a la chica por encima de su hombro y negó un par de veces con la cabeza – Ya no soy digno ni del amor de mi novia, ni del tuyo…soy un hombre que se acaba de convertir en lo más detestable…Lo lamento – desvió nuevamente el rostro, no podía mirarla al rostro luego de lo que había hecho, ya no era digno de nada (?)
 
Se dio media vuelta, llevando las manos tras su espalda, suspiró profundamente y luego murmuró –Por favor…-  dio un par de pasos dramáticamente, deteniéndose antes de decir sus últimas palabras –No corras por los pasillos, buenas tardes -  Continuó su jornada de vigilancia (?)