Überraschung [Priv. Okita][+18]

** Lo miró fijamente, abriendo sus labios con la preocupación a flor de piel, sus manos ya habían sido alejadas como siempre de aquel cuerpo, pero podía sentir el olor de Andrei cerca de el, era nauseabundo, ¿realmente aquel hombre y okita habían tenido algo?. Parecía que tal asiático no se lo iba a decir, entonces bajó su rostro mirando hacia el suelo mientras empuñaba sus manos por la impotencia.

-       N-no me mientas…-

Su pecho dolía tanto, había olvidado lo que era sentir ese dolor, había olvidado que Okita lo hacia sentir de esta manera tan extraña. Y ahora, posiblemente, aquel chico que tenía en frente con aquella actitud tan fría hacia su persona estaba compartiendo algo con otro hombre.

-       Y-yo…-

No sabía como justificarse, sabía que la ultima vez que se habían visto las cosas habían terminado mal, pero ahora podían empezar de cero. Sintió algo recorrer su rostro. ¿Lagrimas?, quedo completamente sorprendido, ahí estaba el, un profesor ya adulto llorando frente a un alumno como si fuera un niño.  Cubrió rápidamente su rostro con ambas manos, era vergonzoso pero, simplemente no podía parar de llorar

-L-lo siento….d-debe ser incomodo…-

Murmuró y luego intentó mirar a aquel chico limpiando sus lagrimas, ¿Por qué estaba siendo tan patético?, debía comportarse delante de el, pero todo lo que había guardado durante tanto tiempo explotó en esta situación, al encontrar a aquella persona donde menos quería verlo.**

**Por más que quería dejar de hacerlo, no podía, simplemente no podía dejar de llorar, estaba demasiado destruido, no comprendía como, en ese tiempo en el que se separaron y dejó de verlo, Andreí pudo avanzar tanto, y porque permitió que todo esto ocurriera. No quería ni pensarlo, no quería pensar en nada, pero cada imagen se le venía a la mente, una más aterradora que la otra, podía soportar ser rechazado, pero no podía hacerlo cuando se trataba de que había otro hombre más en su vida.

Escuchó la voz de Okita, pero tenía vergüenza de mirarlo, incluso de que su cuerpo reaccionara sin su permiso y corriera a abrazarlo, o besarle en desesperación, al mismo tiempo, su respiración se hacía más agitada por el llanto y por más que intentará limpiar sus lagrimas no podía hacerlo, ellas seguían cayendo sin parar.

Solo levantó la vista cuando sintió otra mano limpiarle el rostro, y aquella voz regañarle pero con serenidad.  Cuando vio el rostro del japones, sintió como su pecho golpeaba con fuerza, pero estaba completamente desconcertado.

-L-lo siento...-  

Solo fue capas de murmurar eso, y luego quedó mucho más sorprendido cuando fue abrazado, Okita lo estaba abrazando, podía sentir el olor de su piel, ya no era tan fuerte como el olor de Andreí, ahora estaba sintiendo al verdadero Okita.  Sus brazos desconcertados no sabían si era correcto corresponderle o no y luego de mucho pensarlo, abrazó su espalda con fuerza encogiendo sus hombros de inmediato, ¿Que era esto?, no quería que acabara jamas, quería estar así con el japones por siempre. 

-  Y-yo sé que ...p-piensas que soy un mentiroso, p-pero de verdad me gustas mucho ...N-no quiero que estés acá...-

Las palabras comenzaron a brotar solas de sus labios, aquella oportunidad que el menor le había dado para acercarse le estaba obligando a dejar salir todo lo que sentía, completamente todo y ahora mismo, tenía muchas ganas de besarle hasta que se gastaran ambos labios.

-  M-me siento tan idiota por permitir que Andreí llegara tan lejos, y aunque m-me digas que no ha pasado nada e-estoy seguro que ese detestable hombre hizo a-algo acá contigo...¡N-no es justo¡, ¿Porque el y yo no?, di-digo, estoy completamente seguro que soy mejor que el en todos los aspectos, p-puede que sea algo torpe y distraído, p-pero siento que si tuvieras que elegir a algún hombre para ti y-yo debería ser el único que pasara por ti mente ... Hahaha s-soy un egolatra...-

Cerró los ojos con fuerza, sin soltar aquel abrazo, podía sentir el corazón de aquel chico latir serenamente, mientras que el propio estaba a punto de salir por su pecho, no había imaginado quedar tan alterado por una situación así y ahora mismo le ocurría. **

-No comprendía porque simplemente fue y lo abrazó, pero parecía que aquello solo había provocado que aquel maestro se desesperara aun mas, ya que no dejaba de hablar sobre lo que sentía, y aunque en su cabeza su mente decía mil veces “Mentiroso”, no quería que el profesor escuchara aquellas palabras, no en el estado en el que el adulto estaba en este momento.
 
Alejó un poco  a aquel hombre, sus ojos ya se habían hinchado por las lagrimas, ¡Que idiota!, había que cuidarlo como si fuera un crio que se rompió la rodilla o algo así, se supone que el era el adulto, esto no tenía ninguna clase de sentido en su cabeza, y no fue capaz de evitar caer en comparaciones, el profesor Andreí versus el profesor Joshua.-
 
Cálmese…
 
-Lo tomó de la muñeca guiándolo hacia el sofá y haciendo que este se sentara, mientras iba directamente hacia la cocina para sacar un vaso y llenarlo con agua, sabía que eso no iba a dañarlo como había ocurrido la noche anterior con el atún. Su vista rodó hacia el basurero, allí estaba aquel tarro de atún con un ligero toque rojo.
 
Caminó hacia aquel profesor dándole el vaso mientras le miraba como siempre, con aquella inexpresiva expresión en su rostro. “Deje de llorar” pensaba, “Se supone que su ex novia volvió, ¿Por qué no va donde ella?”, volvía a pensar, y cada vez se ponía más furioso. Simplemente se sentó a su lado con los brazos cruzados y los ojos cerrados en completo silencio, solo para romper el silencio con una de las preguntas que pasaban en su mente y que se llegó filtrar hacia sus labios.-
 
Andreí sensei me comentó que ha vuelto su ex novia, mis felicitaciones sensei…
 
- “Mentiroso, mentiroso, mentiroso” pensaba constantemente, ¿Por qué estaba sintiéndose tan incomodo de repente?-

**Terminó guiado hacia el sofá por aquel niño, y aunque estaba ligeramente mas calmado que hace unos minutos,aun sentía que sus lagrimas caían más escasas por sus mejillas.  Posó sus manos en sus propias piernas bajando el rostro mientras aquel hermoso chico iba por algo para beber, se sentía increíblemente bien de que aquella persona estuviera atendiéndolo con mucho cuidado, pero al mismo tiempo pensaba que estaba siendo un verdadero estorbo y más para un menor de edad que era su alumno.

Su mirada fue hacia el cuando este se sentó en el sofá, y ladeo un poco el rostro para mirarle fijamente, no podía creer lo mucho que le gustaba aquel rostro tan estricto y esos hermosos ojos verdes. 

Quedo sorprendido por sus ultimas palabras, ¿"Andreí sensei" dijo?, frunció el ceño notoriamente, ¿porque le había dicho algo así?, ¡no podía creerlo!,¡así jamas okita creería en sus sentimientos!, no pudo articular bien una palabra mientras ordenaba las ideas en su cabeza , ¿aquel detestable hombre había usado una jugada tan sucia para obtener lo que quería? ¡era inaudito!.

-¡Okita yo le dije a mi ex novia que tu me gustabas! -

Empuñó sus manos mirándole fijamente, tenía que dejarle en claro al menor de que era el a quien amaba con todos sus sentidos y aunque no era correspondido, iba a luchar contra todos{?} aunque tuviera que pelear con la reina gato quien era una rival extremadamente fuerte {????}.

Posiblemente , no quería indagar en ideas incorrectas pero, posiblemente, Okita estaba celoso como había dicho Gerard antes, y agradecía que eso fuera así porque significaba que en el fondo era especial para aquel japones.  Sus brazos volvieron a rodear al chico en un abrazo cerrando con fuerza los ojos.**

-  ¡¡Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero, te quiero !! -

** Comenzó a reir de inmediato porque el simple hecho de compartir así con el lo hacía feliz, ya casi había olvidado lo que había ocurrido antes, aquel mar de lagrimas y desesperación, aunque eso era típico de su persona, pasaba de una emoción a otra con mucha rapidez, se preguntaba si quizás tenía algún trastorno psiquiátrico.

La distancia que había entre Okita y el durante el abrazo era tan corta que podía disfrutar de su voz demasiado cerca, pero que fue alejado, logró visualizar algunas marcas extrañas en su cuello y pecho, claro, estaba tan cerca de el que podía notarlo e inmediatamente supo de que se trataba, más cuando aquel chico intentó decirle algo, pero se limitó a callar, era obvio, después de todo estaban en el departamento de Andreí, de a poco comenzó a atar los cavos, ¿Era posible que Okita mantuviera relaciones sexuales con Andreí?, otra vez pudo sentir el dolor de su pecho, pero ¿porque no se lo decía?. 

-   ¿Está bien para ti tener sexo con el?-

Quizás fue un desajuste conductual, pero ahora más que ganas de llorar, estaba completamente molesto, no entendía porque no le decía lo que estaba ocurriendo, ¿Acaso a Okita le gustaba Andreí y trataba de protegerlo?, ¡¿Eso era posible?!.  Se puso de pie y tomó su mano haciendo que este se parara igual, y luego caminó en silencio con el asiático hacia la habitación de maestro de matemáticas. La cama estaba totalmente desordenada, realmente se habían dado una verdadera fiesta.


Lanzó con fuerza a Okita sobre la cama y cerró la puerta, levantó un poco su rostro y le miró desde arriba mientras murmuraba ligeramente.

- Entonces estará bien tener sexo conmigo también ...¿no?...-

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